Haber puesto los sentidos alertas para escuchar el testimonio de Nora Cortiñas en el contexto del rechazo al 46to. aniversario del golpe de Estado cívico-militar incluyendo al extractivismo como parte de ese nefasto legado, nos trajo premio.
Y la propia Nora, integrante de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, pero figura notable de cada lucha justa a ser librada, nos expresó sus pensamientos y sentires para construir un alegato donde la memoria dialoga con el presente, donde aquel genocidio revive en cada persona hambreada, perseguida, desaparecida, asesinada o judicializada por el mismo poder hegemónico de entonces.
En esta charla, acompañada por la economista Beverly Keene, con quien comparte el espacio Autoconvocatoria por la Suspensión del Pago y la Investigación de la Deuda, apareció también esa traba macroeconómica que perversamente funciona como justificadora de políticas de ajuste pero, también y además, para propiciar el oportunismo más vil entre integrantes del mismo staff gubernamental y como impulsora del “mal menor” que supone la entrega de territorios y soberanía alimentaria para convertirnos en seres honorables por cumplir con pagos contraídos.
Esas extrañas piruetas que se aprecian en el circo partidario y representador exhiben que allí hay ausencia total de coraje e imaginación para salir del propio laberinto que construye en sus tumbos timoratos y devastadores.
Pero así como el panorama, por dónde se lo mire, es desolador, sin embargo es capaz de entregar una receta tan sencilla como difícil de poner en acto que es reunirnos a pensar y hacer otra cosa, esa que los poderosos y sus serviles amanuenses no pueden siquiera vislumbrar.
En Después de la Deriva abrimos así, una vez más, los micrófonos y las antenas para ser medio y parte de esa oleada de cualquieras que se cansó de repetir fórmulas fallidas, que ya no quiere de dejar en otras manos la cosa común que nos convoca, que sin dejar de resistir ve necesaria la construcción de ese otro mundo de iguales que nos merecemos y que ya no puede esperar más.
Descargar