El uruguayo Raúl Zibechi, uno de los más lúcidos e inquietos observadores de la realidad desde una perspectiva autónoma y compañera, regresa a este espacio para explicar por qué “el mundo está desbocado”.

La charla, motivada por la salida a nivel local de “El Estado realmente existente. Del Estado de bienestar al Estado para el despojo” que escribió a cuatro manos con el español radicado en Quito Decio Machado, nos permite volver a poner en perspectiva una crítica al ciclo progresista sin perder de vista las dramáticas continuidades de ese proceso.

El libro de los sociólogos, politólogos y periodistas desnuda qué tan amargas eran las mieles de aquel pasado que ahora se añora, quizás por ser colocado frente al violento avance de propuestas de ultraderecha que arrasan conquistas y subjetividades.

Lejos de dejarse encandilar por esas disputas, el militante y viajero advierte que “no se puede seguir haciendo lo mismo que ya fracasó” y lo fundamenta a partir de una certeza inquietante cuando sostiene: “Las formas de acción del pasado ya no son útiles”.

Pero, al mismo tiempo, invita a un ejercicio tan necesario y doloroso cuando postula: “Es un momento para mirarnos al espejo y ver lo que nosotros hicimos mal”, como una fórmula que entonces sí nos habilite a “poder salir adelante”.

Aún cercados por guerras internas y externas, Raúl pondera el presente del zapatismo y el pueblo kurdo como referencias posibles de un tipo de andar político y de construcción colectiva que abra horizontes de largo aliento a la locura devastadora del capital.

“Hoy lo que necesitamos es apostar a la vida y no apostar a más muerte”, lo sintetiza Zibechi en este nuevo diálogo con Después de la Deriva que celebramos como posibilidad de escucharnos para no dejar de intentar pensar y hacer ese mundo radicalmente distinto que se libre del yugo del capital y su lógica bestial más o menos maquillada para la ocasión.

Descargar