PROGRAMA 352: Río Negro y cómo queremos vivir

Salir de los grandes lenguajes publicitarios y adentrarse en los territorios; esa parece de alguna manera ser la meta o al menos un requisito fundamental del caminar.

Salir entonces de esta gran propaganda que significa Vaca Muerta como boom energético en nuestro país y llegar, por ejemplo, a Neuquén, y comprender, ver y tocar la extensión vastísima de villas miseria, supuestamente en el lugar más rico de nuestro país.

Después conectar con Allen y lo que representa esos perales enfermos de muerte, directamente contaminados con los grandes desechos que tiene la fractura hidráulica, esa forma particular de llamar al despojo.

Después pasar por Roca por Fiske y comprender que las comunidades se organizan y tratan de generar otras realidades. Y lo mismo en la Costa, en Las Grutas, a pesar de los pesares, a pesar de un oleoducto directamente conectado con Vaca Muerta, con Neuquén. Y también comprender el proyecto de un barco que promete licuefacción.

Pero nuevamente la red de comunidades costeras que trata de organizarse y que trata de pensar otro vínculo con el mar.

Pasar por San Antonio Oeste. Comprender lo que significó una historia reciente dramática de nuestro país y los desechos terribles de una promesa de plomo que todavía está no solo en las calles, no solo en los basurales, sino también está ni más ni menos que en el cuerpo de varios y varias de las pobladores de San Antonio y de nuestro país

Llegar finalmente a Viedma y en allí reencontrarse con un montón de compañeros y compañeras colectivos, pueblos originarios, personas que se dirigen hacia la agroecología, personas de la ciencia, comunidades, colectivos que básicamente se están preguntando cómo, hacia dónde caminar, hacia dónde ir y hacia dónde y cómo organizarse.

Va este programa, Después de la Deriva en Río Negro, y ahí nos recibieron, ahí abrazamos, y ahí caminamos. Bienvenides a caminar con nosotres.

PROGRAMA 351: Veneno como politica de Estado, otra vez

El 16 de septiembre pasado un mosquito fumigador pasó aplicando agrotóxicos a menos de 1000 metros de una escuela en La Lata, partido de Exaltación de la Cruz, un distrito ubicado en el noreste de la provincia de Buenos Aires cuya principal actividad es el agronegocio.
Funcionarios municipales y provinciales lo vieron y después mintieron en sus declaraciones ante la Justicia.

Las vecinas y vecinos que conforman Exaltación Salud les denunciaron, también al fiscal que tiene más de 10 causas por fumigaciones ilegales sin investigar; unos días después ocurrieron otras dos pulverizaciones cercanas a viviendas.

En Entre Ríos, mientras la justicia ratificó la distancia mínima de 1000 metros para fumigaciones terrestre en la localidad de me falta, el Poder Legislativo avanza con la modificación de una Ley para bajar todas las distancias mínimas e incorpora al dron como un “aplicador” manual que puede tirar agrotóxicos al lado de una casa.

En este edición volvemos a hablar de Veneno como política de Estado, pero esta vez en la voz de quienes habitan los territorios: por un lado, Anabel Pomar y Verónica Garri de Exaltación Salud, y por el otro Daniela Verzeñassi, del Foro Ecologista de Paraná y de la Coordinadora Basta es Basta.

De lo micro a lo macro y en sentido inverso escuchamos cómo se legisla, permite e impulsa el modelo del agronegocio, aún sabiendo sus consecuencias sobre la vida humana y los ecosistemas y, pese a lo desolador que parece el presente, rescatamos sus voces como llamas que permiten alumbrar otros modos de habitar este mundo.

Vaya esta Deriva para ellas, para las muchas y muchos que aun en los contextos más adversos se plantan para defender la vida y dar testimonio con sus vidas; sabemos que está difícil, pero quienes hacemos Después de la Deriva queremos seguir andando, buscando las maneras, dándonos permiso para frenar, para llorar cuando lo necesitamos, pero luego continuar porque, como nos enseñaron compas de El Algarrobo en Andalgalá: “Desistir no es una opción”.